Burro

   Burro del color de la materia humilde y terrenal, una criatura de paso tranquilo y naturaleza afable. Su existencia es una demostración palpable de que la alegría reside en la rutina de la conexión.

   Burro es un puente entre reinos: se comunica con el Gallo en un intercambio de saberes matutinos, donde el lenguaje no necesita ser complejo, solo sincero. Y con el Perro Amarillo (el fiel testigo de otras historias) confirma la lealtad con el gesto más elemental: el abrazo. Es una complicidad sin palabras que establece un círculo de afecto inquebrantable.

   La clave de su carácter se encuentra en su rostro: el color café de su pelaje representa la humildad y la conexión con la tierra, pero sus ojos azules son el verdadero milagro. Son un espejo del cielo, una chispa de azul que irradia la inocencia y la alegría con la que mira al mundo.

Es una historia de amistad  de la simple y gozosa certeza de estar acompañado.